BOLIVIA, 22 Oct (EUROPA PRESS)
Un estudio revela que la civilización solo reduce ligeramente la violencia hacia las mujeres en las sociedades estatales de la región andina
Un reciente estudio llevado a cabo por un equipo de investigadores de grupos arqueológicos enfocados en la región de los Andes en América del Sur, arrojó luz sobre una de las cuestiones más debatidas entre antropólogos: hasta qué punto la 'civilización' contribuye a la protección contra la violencia. Publicado en la revista PNAS, el estudio sugiere que, aunque ser parte de una sociedad estatal organizada centralmente puede reducir la incidencia de violencia, este efecto es relativamente menor y se limita principalmente a las mujeres.
Thomas J. Snyder, autor principal del estudio y candidato a doctorado en la Universidad de California, Davis, explicó, "Nuestros hallazgos sugieren que estar en una 'civilización' puede reducir la violencia, pero solo para las mujeres, y solo un poco entonces". Este fenómeno es más evidente en el caso de la violencia letal, lo cual puede estar relacionado de manera más plausible con conflictos bélicos que con actos de violencia no letal.
Para llegar a estas conclusiones, los investigadores analizaron la frecuencia y el tipo de violencia experimentada por adultos en la región andina prehispánica, comparando grandes estados con organización central (civilizaciones) y comunidades políticamente más autónomas. La base de datos incluyó información de 8.607 individuos a lo largo de un período de 3.000 años, obtenida de 169 artículos publicados que abarcaron 155 sitios arqueológicos ubicados en Perú, Ecuador, Chile y Bolivia.
Los resultados mostraron que, en comunidades autónomas, las probabilidades de enfrentar encuentros violentos potencialmente letales son similares para ambos sexos. Sin embargo, en las sociedades centralmente organizadas, mientras que el riesgo se mantuvo constante para los hombres, disminuyó para las mujeres.
Este estudio se concentró en la violencia interpersonal directa, tanto en el contexto de guerras o batallas como en el seno del hogar, y destacó que las mujeres no siempre están protegidas de la violencia durante los conflictos bélicos, ya sea por ser capturadas como prisioneras o por participar en defensa de sus comunidades.
La investigación subraya la importancia de considerar tanto el género como la organización sociopolítica cuando se estudia el impacto del conflicto interpersonal en las sociedades antiguas. "El sexo de un individuo era tan importante o más importante que el tipo de sociedad que habitaban en afectar el riesgo de trauma", afirmó Snyder.
Este análisis no solo aporta nuevas perspectivas sobre la complejidad de la violencia en las sociedades prehispánicas andinas sino que también plantea importantes consideraciones para futuros estudios sobre violencia, género y cambios sociopolíticos.