Las autoridades kurdas de Siria condenan "enérgicamente" el ataque "deliberado" contra un convoy civil
MADRID, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
Al menos cinco personas, uno de ellos conductor de ambulancias, han muerto este jueves en un bombardeo perpetrado por aviones de combate turcos contra un convoy civil que se dirigía a la presa de Tishrin, situada en la provincia siria de Alepo (norte), según ha indicado este miércoles el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
El organismo, con sede en Londres pero con informantes en el país árabe, ha señalado que "un gran número de civiles, incluidos miembros del personal médico", han resultado heridos. También ha informado de que el convoy se dirigía a la presa para protestar por los ataques proturcos y mostrar su apoyo a las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
Las propias FDS habían denunciado a través de su canal de Telegram que "los aviones de guerra de la ocupación turcos bombardearon violentamente el convoy de civiles" que se dirigían a la prensa, al sur de Manjib, provocando víctimas.
Las autoridades autónomas kurdas en Siria --la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (AANES)-- han "condenado enérgicamente el ataque deliberado de Turquía contra civiles en un bombardeo dirigido contra un convoy", que ha dejado según su balace tres muertos y 19 heridos, y han hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que adopte medidas "inmediatas" para detener la escalada.
Horas antes, el observatorio informó de la muerte de trece rebeldes y cinco miembros de las FDS en combates registrados en los alrededores de la presa.
Durante la jornada, el Gobierno turco advirtió de que llevará a cabo una ofensiva en el noreste de Siria contra la milicia kurdo-siria Unidades de Protección Popular (YPG) --integrada en las FDS-- si no se expulsa del país a los miembros del grupo, vinculado al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), considerado como terrorista por Ankara.
Desde la caída del régimen de Bashar al Assad, Ankara ha pedido a las nuevas autoridades sirias que se hagan cargo de este frente. El ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, vaticinó que no reconocerá ni al YPG ni la llamada administración kurda del noreste de Siria, Rojava, en el marco del establecimiento de una nueva estructura del poder en el país vecino.