La orden prohíbe a los funcionarios "promover una interpretación de la ley que contravenga la opinión del presidente o del fiscal general"
MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha firmado este martes una orden ejecutiva para aumentar el control y la supervisión de la Casa Blanca sobre todos los departamentos y agencias, que deberán presentar borradores de regulaciones para su revisión.
"Será política del Poder Ejecutivo asegurar la supervisión y el control presidencial de todo el Poder Ejecutivo. Además, todos los departamentos y agencias ejecutivas, incluidas las llamadas agencias independientes, deberán someter a revisión todas las acciones regulatorias significativas propuestas y finales a la Oficina de Información y Asuntos Regulatorios (OIRA) dentro de la Oficina Ejecutiva del presidente antes de su publicación en el Registro Federal", reza una hoja informativa.
La Casa Blanca ha defendido esta orden alegando que su objetivo es "mejorar la administración" y "garantizar la rendición de cuentas de todos los organismos", si bien no se aplicará a la Reserva Federal.
El decreto establece que "el presidente y el fiscal general, sujetos a la supervisión del" primero, "proporcionarán interpretaciones autorizadas de la ley para el Ejecutivo". "Ningún empleado del Poder Ejecutivo que actúe en su capacidad oficial puede promover una interpretación de la ley (...) que contravenga la opinión del presidente o del fiscal general sobre un asunto de Derecho", se lee en el escrito.
TRANSPARENCIA SOBRE "DESPILFARRO"
La Casa Blanca ha ordenado asimismo a los directores de los departamentos y agencias que "tomen todas las medidas necesarias para públicos, en la medida máxima permitida por la ley (...) los detalles completos de cada programa terminado, contrato cancelado, subvención terminada o cualquier otra obligación interrumpida de fondos federales".
"El pueblo estadounidense tiene derecho a ver cómo el Gobierno Federal ha malgastado el salario que tanto le ha costado ganar", ha señalado en un "memorándum" difundido a los medios.
Así, ha denunciado que, con sus impuestos, los ciudadanos han "subvencionado proyectos ideológicos en el extranjero y organizaciones nacionales dedicadas a acciones que socavan el interés nacional".