Publicado 28/02/2024 18:46

EEUU.- El Supremo se pronunciará sobre la inmunidad presidencial de Trump en el caso de injerencia electoral de 2020

February 24, 2024, Washington Dc, District Of Columbia, USA: Former president Donald Trump gives a speech from CPAC in Washington DC
February 24, 2024, Washington Dc, District Of Columbia, USA: Former president Donald Trump gives a speech from CPAC in Washington DC - Europa Press/Contacto/Laura Brett

MADRID 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

El Tribunal Supremo de Estados Unidos debatirá a finales de abril si el expresidente estadounidense Donald Trump gozaba de inmunidad presidencial en el marco del caso federal en su contra por intentar revertir los resultados electorales de 2020.

El Supremo ha aceptado este miércoles el desafío legal y, por tanto, escuchará los argumentos de las partes sobre si el expresidente contaba con inmunidad presidencial "frente a un proceso penal por una conducta que supuestamente involucra actos oficiales durante su mandato", reza el fallo, ha recogido la cadena NBC News.

La decisión equivale, como mínimo, a una victoria a corto plazo para Trump, puesto que el caso se podría retrasar hasta el verano o incluso hasta después de las elecciones presidenciales de noviembre en las que el expresidente parte como favorito dentro del Partido Republicano.

Trump ha basado gran parte de su defensa en que, como presidente, no cabe siquiera que pueda ser examinado por los casos que ha abierto el fiscal especial Jack Smith. Según el antiguo mandatario, sus movimientos entraban dentro de sus competencias oficiales.

El magnate se enfrenta a un total de cuatro cargos federales por presunto fraude electoral, concretamente por conspirar contra Estados Unidos; impedir que el Congreso certifique los resultados recogidos en las urnas; conspirar contra el derecho al voto e intentar obstruir la certificación de las actas.

Trump se declaró no culpable de los cuatro cargos el pasado mes de agosto. Los fiscales defienden que Trump manipuló a los manifestantes al hacerles creer que el entonces vicepresidente Mike Pence podía cambiar los resultados de las elecciones, lo que finalmente derivó en el asalto al Capitolio el 6 de enero.