MADRID 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los nuevos casos de coronavirus registrados en Corea del Sur vuelven a sobrepasar los 1.000 diarios debido a un brote en una prisión de Seúl y en residencias de ancianos de todo el país, un aumento que se da en medio de medidas más estrictas.
La Agencia para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea del Sur (KDCA, según sus siglas en inglés) ha informado este lunes de 1.020 nuevos positivos --985 de transmisión local--, por lo que la cifra total de contagiados en el país asiático es ya de 64.264.
Además de estos nuevos casos, las autoridades sanitarias han confirmado la muerte de 19 personas, situando la cifra de víctimas mortales de la enfermedad en 981.
De los casos nuevos, 324 se han registrado en Seúl y 260 en la provincia de Gyeonggi, que rodea la capital, mientras que Incheon, que se encuentra al oeste de Seúl, ha sumado 101 contagios. Por otro lado, 126 casos se han vinculado a una prisión en el este de Seúl, elevando el total de positivos detectados en la instalación penitenciaria a 1.084.
El registro de este lunes supone un incremento considerable respecto a los 657 casos que se detectaron el día anterior, a pesar de que el sábado las autoridades aumentaron las medidas de distanciamiento social de nivel 2,5 --el cuarto en el sistema de cinco niveles-- en el área metropolitana de Seúl y las de nivel 2 en el resto del país, con una vigencia hasta el 17 de enero.
Asimismo, las autoridades han decidido aplicar la prohibición de reuniones privadas de más de cuatro personas, que hasta ahora solo funcionaba en el área metropolitana de Seúl, mientras que, a partir del viernes, las personas que quieran acceder al país deberán presentar una prueba negativa del coronavirus con una vigencia de 72 horas.