MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de China, Wang Yi, ha pedido este martes al Gobierno japonés gestionar con "calma y de forma racional" el asesinato de un niño japonés de diez años, que fue apuñalado la semana pasada cuando se dirigía al colegio en la ciudad china de Shenzen, en el sur del país.
Wang se ha reunido con su homóloga japonesa, Yoko Kamikawa, en los márgenes del periodo de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York, donde ha resaltado la importancia de evitar "politizar o provocar un aumento de la tensión" entre los dos países por este asunto.
"Pekín salvaguardará como siempre la seguridad de todos los ciudadanos extranjeros en China", ha asegurado ante las críticas por la creciente inseguridad para las personas procedentes del gigante asiático, según un comunicado del Ministerio de Exteriores. Así, ha afirmado que China investigará lo sucedido "de acuerdo con la ley".
Este mismo martes, el portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Li Jian, ha señalado que este es un "caso aislado" que "ya se está investigando". Además, ha lamentado que se esté "exagerando" lo sucedido y ha descartado que haya un problema de seguridad. "Estas declaraciones no concuerdan con la realidad", ha manifestado.
Kamikawa, por su parte, ha exigido a las autoridades chinas que "aclaren los hechos", incluidos los motivos del ataque, y que lleven al autor ante la Justicia. "Pido que China actúe especialmente ante los mensajes antijaponeses en redes sociales, incluidos aquellos relacionados con los colegios japoneses", ha puntualizado.
El Gobierno nipón ha hecho un llamamiento a que las partes "trabajen en calidad de vecinos para mejorar las relaciones y resolver estos obstáculos", tal y como refleja un comunicado del Ministerio de Exteriores japonés.
El ataque, que ha dejado un detenido de 44 años, se produce después de otro asalto similar registrado el pasado mes de junio, cuando un hombre mató a una mujer china que trató de proteger a un grupo de estudiantes japoneses que viajaban a bordo de un autobús escolar en la provincia de Jiansu.