Actualizado 09/12/2016 10:46

La UE coloca energía, indicaciones geográficas y contratación pública en prioridades del acuerdo con México

Bandera de la Unión Europea
FRANCOIS LENOIR / REUTERS

BRUSELAS 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Unión Europea ha revelado este viernes las líneas directrices de su negociación con México para cerrar un nuevo pacto comercial que "modernice" el que ya comparten, entre las que destaca el interés por abrir la contratación pública mexicana a las empresas europeas, asegurar la protección de las indicaciones geográficas y potenciar los intercambios de productos de energía y materias primas.

"Han pasado dieciséis años desde que entro en vigor el actual acuerdo UE-México y hoy necesitamos adaptarlo a una nueva realidad", ha argumentado la comisaria de Comercio, Cecilia Malsmtröm, al dar a conocer las prioridades europeas.

Malmström, que tiene mandato de los 28 para negociar en nombre del bloque, ha confiado en que la publicación de las prioridades sirva para alimentar una "discusión" entre las partes interesadas, incluida la sociedad civil, que permita mejorar el convenio.

Las partes han mantenido ya dos rondas preliminares de contacto, pero no se ha llegado aún a la fase del intercambio de ofertas comerciales concretas.

La UE aspira a que sus propuestas permitan "reducir las barreras regulatorias innecesarias" al comercio e incrementar la parte de los beneficios comerciales que reciben las pequeñas empresas.

También espera que sirvan para "elevar los niveles" de la protección de los consumidores, trabajadores y del medio ambiente y para "avanzar con México hacia el desarrollo sostenible".

Por ello, la Unión Europea apunta la necesidad de abrir el mercado público de las licitaciones de cada parte a las empresas del otro lado y asegurar una protección "más amplia" de la propiedad intelectual, incluidas las apelaciones de las indicaciones protegidas.

Otra de las claves para el bloque comunitario es la cooperación en materia de importaciones relacionadas con la inocuidad de los alimentos, la sanidad vegetal y animal. Y dar más flexibilidad a las reglas de origen, que establecen qué productos pueden beneficiarse de tarifas arancelarias más bajas.