Actualizado 30/10/2014 15:54

Rousseff se toma unos días de descanso en la playas de Bahía

Presidenta de Brasil Dilma Rousseff
Foto: FRANCOIS LENOIR / REUTERS

RÍO DE JANEIRO, 30 Oct. (Notimérica/EP) -

   La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se ha tomado unos días de descanso tras ser reelegida y ya se encuentra en la playa de Inema, en el litoral de Bahía, donde descansará hasta el domingo. El lunes retomará su agenda de trabajo en el Palacio del Planalto.

   Rousseff se encuentra desde este miércoles por la noche en la Base Naval de Aratu, en la playa de Inema, unos terrenos militares alejados de curiosos en los que suele pasar las vacaciones, especialmente las de fin de año. Ha viajado acompañada de su hija, Paula Araújo, y de su nieto Gabriel, de cuatro años.

   En una entrevista este martes en el canal Bandeirantes la recién reelegida presidenta dijo estar "muy cansada" después de la carrera electoral. La tensión fue máxima durante varias semanas y su victoria ha sido muy ajustada, por el 51% de los votos. En una charla informal aseguró que cuando el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, la llamó para felicitarla por la victoria, le recomendó que descansase un poco más: "Le pareció muy poco. Creo que allí ellos tienen la costumbre de cogerse más días de vacaciones", dijo Rousseff.

   La mandataria brasileña dio algunas muestras de cansancio a lo largo de la campaña electoral. En más de una ocasión ha aparecido casi afónica y al terminar uno de los últimos debates televisados tuvo un bajón de tensión mientras hablaba con una reportera, aunque no llegó a desmayarse.

   Cuando vuelva al trabajo Rousseff tendrá que concentrarse en formar su nuevo Gobierno, aunque la investidura no se producirá hasta el 1 de enero. Entre sus tareas más urgentes están nombrar a un nuevo ministro de Economía capaz de calmar a los mercados y negociar con los partidos aliados, especialmente con el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), el principal de su base aliada.

   En apenas unos días el Congreso Nacional ya ha dado muestras de las dificultades que tendrá que afrontar en su segundo mandato. Las negociaciones para conseguir apoyos de los partidos tendrán que interrumpirse los días 15 y 16 de noviembre, cuando Rousseff viajará a Brisbane, en Australia, para participar en la Cúpula del G-20.

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