BOLIVIA, 1 Nov (EUROPA PRESS)
El exmandatario boliviano Evo Morales hizo un llamado el viernes a sus seguidores para desmontar los bloqueos que durante 19 días han paralizado importantes rutas, particularmente en Cochabamba, y simultáneamente anunció su decisión de entrar en huelga de hambre con el fin de instar al gobierno a iniciar mesas de diálogo.
Morales, en conferencia de prensa, expresó la complejidad de la situación y cómo ello dificulta encontrar soluciones que contenten a todas las partes. Declaró que mantendrá la huelga de hambre "hasta que el Gobierno acceda a establecer mesas de diálogo".
El ex presidente sugirió la creación de dos negociaciones, una enfocada en asuntos políticos y otra en temas económicos, recomendando la inclusión de intermediarios internacionales y países amigos para asegurar un proceso "transparente y efectivo".
Subrayando la importancia de levantar los bloqueos para evitar un "derramamiento de sangre", Morales llamó la atención sobre los recientes enfrentamientos entre sus partidarios y las fuerzas de seguridad, que incluso llevaron a la toma de tres cuarteles militares, situación confirmada por el presidente Luis Arce.
Morales exhortó a sus seguidores a reconsiderar los bloqueos como medida para "evitar la violencia, proteger la economía nacional y atender las necesidades de los bolivianos", en un esfuerzo por "construir puentes y buscar una salida pacífica para todos".
Por otro lado, Arce denunció ante la comunidad internacional que "grupos armados afines" a Morales asaltaron tres cuarteles del Ejército, tomando como rehenes a militares y sus familias, y resaltó que estos grupos atacan incluso a policías con armas y dinamitas, enfatizando que la toma de una instalación militar constituye un delito de traición a la patria.
Las protestas, que comenzaron hace dos semanas principalmente en Cochabamba, pero también en Potosí, Oruro, y Santa Cruz, inicialmente motivadas por la crisis económica, se han tornado en reclamos políticos de Morales, quien insiste en presentarse a nuevas elecciones a pesar de no estar habilitado. Este aumento en tensiones se da en un contexto donde Morales enfrenta varias causas judiciales, incluyendo alegaciones de abuso de menores y trata de personas, relacionadas con una menor de 16 años durante su presidencia, de quien tuvo una hija.