BOLIVIA, 19 Aug (EUROPA PRESS)
José Borrell, el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, criticó duramente el lunes las acciones del presidente venezolano Nicolás Maduro, quien acudió al Tribunal Supremo de Venezuela buscando protección luego de autoproclamarse ganador de las controversiales elecciones presidenciales, acto que no ha sido validado con la publicación de las actas electorales y que ha suscitado sospechas de fraude a nivel internacional. Borrell calificó esta maniobra como "el colmo del sarcasmo".
Durante la inauguración de la XXIII edición del curso 'Quo Vadis Europa?', que Borrell dirige en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en Santander, expresó su preocupación por el hecho de que Maduro haya recurrido al máximo tribunal del país, instancia que, según argumenta, no tiene como función la verificación de los resultados electorales, tarea asignada al Consejo Nacional Electoral (CNE) controlado por el gobierno.
El alto representante europeo señaló la importancia de que Maduro publicara las actas electorales para permitir una verificación por parte de la comunidad internacional, destacando la postura de la oposición venezolana, liderada por Edmundo González y María Corina Machado, quienes han difundido resultados muy diferentes, afirmando tener el respaldo de más del 80% de las actas de votación.
Borrell también comentó sobre el agravamiento de la represión por parte del gobierno chavista, mencionando que ya hay más de 2.000 personas detenidas, situación que calificó de "dramática". Expresó su inquietud por el futuro inmediato del país y reafirmó la postura de la Unión Europea de exigir la publicación de los resultados electorales mientras permanece atenta a la sentencia que emitirá el Tribunal Supremo venezolano.
Además, mencionó una propuesta de "algún país latinoamericano" sobre repetir las elecciones y compartir el poder entre el gobierno y la oposición, aunque se mostró esceptico sobre cómo se implementaría tal acuerdo.
José Borrell subrayó la urgencia de resolver la situación para prevenir una crisis mayor en Venezuela, confirmando el compromiso de la UE en buscar una solución que evite escenarios más graves en el país sudamericano.