BUENOS AIRES, 4 Ago. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de las Madres de la Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, se ha negado a declarar este jueves por el supuesto desvío de fondos a través del proyecto Sueños Compartidos, lo que ha llevado al juez Marcelo Martínez a ordenar su detención.
De Bonafini ha enviado una carta a Martínez a través de sus abogados en la que le adelantaba que, por segunda vez, no acudiría a su juzgado para prestar declaración porque desde 1977, cuando desapareció su hijo a manos de la dictadura militar no ha sufrido más que agresiones "de la mal llamada Justicia".
"En ese momento empezó mi calvario. Hice 168 presentaciones por mi hijo Jorge, luego en conjunto reclame por mi otro hijo Raúl, que fue desaparecido ese mismo año, en una constante peregrinación por los juzgados, siempre padecí las mismas injusticias. Luego en mayo de 1978, desapareció también mi nuera María Elena, nada cambió", ha recordado.
La activista argentina ha subrayado que las Madres de la Plaza de Mayo "siempre van a defender los valores de solidaridad social" y por ello ha ratificado que "lucharán para que alguna vez nos enfrentemos con jueces probos que nos ayuden a sentir el valor de la Justicia".
En respuesta, Martínez ha ordenado detenerla con la intención, según ha informado el diario argentino 'Clarín', de que pase la noche en una comisaría, lo que ha generado una masiva respuesta en torno a la sede de las Madres de la Plaza de Mayo.
La Policía Federal se ha trasladado al lugar para arrestar a De Bonafini, pero se ha encontrado con un cordón humano formado por simpatizantes de las Madres de la Plaza de Mayor que han impedido pasar a los agentes.
Los partidarios de la organización de defensa de los Derechos Humanos han escoltado a De Bonafini a su salida de la sede para que pudiera participar en la tradicional marcha de los jueves. "Estoy muy coqueta, me estoy por casar", ha dicho ya desde la Plaza de Mayo.