Pese a que el esfuerzo financiero es menor en la compra, muchas personas siguen sin poder acceder a la vivienda en propiedad, según Pisos.com
MADRID, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -
El 59% de los hipotecados y el 70% de los inquilinos destinan más del 30% de sus ingresos al pago de la vivienda, según se refleja en el último informe del portal inmobiliario Pisos.com.
"Uno de los principales datos que revela el informe es que los propietarios con hipoteca tienen más facilidad para ajustar el pago de su vivienda a un porcentaje razonable de sus ingresos en comparación con los inquilinos", ha señalado el director de Estudios de pisos.com, Ferran Font.
Los datos por generaciones varían "considerablemente". Así, en el caso de los 'Z', sólo el 24% de los jóvenes propietarios destinan hasta un 30% de sus ingresos a la hipoteca, mientras que en el caso del alquiler esta cifra asciende al 34%.
Con los 'millenials', un 43% de los hipotecados logran ajustar su cuota al 30% de sus ingresos, mientras que sólo el 25% de los inquilinos lo consiguen.
Con las generaciones más envejecidas los datos muestran que el 42% de los hipotecados de la 'generación X' destinan hasta un 30% de su salario, mientras que en alquiler el porcentaje es del 35%.
En última instancia, los 'boomers' aparecen como el grupo con menor carga financiera, ya que el 46% de los hipotecados y el 27% de los inquilinos cumplen con este umbral.
El análisis también revela una brecha de género en el acceso a la vivienda, ha revela Font. En el caso de las hipotecas, el 37% de las mujeres destinan hasta un 30% de su salario al pago de la cuota mensual, frente al 47% de los hombres.
En el alquiler, la diferencia es aún mayor: sólo el 24% de las mujeres pueden permitirse un esfuerzo inferior al 30%, mientras que en los hombres este porcentaje asciende al 37%.
COMPRAR SIGUE SIENDO MÁS RENTABLE, PERO NO ES ACCESIBLE PARA TODOS
A pesar de que el esfuerzo financiero es menor en la compra que en el alquiler, muchas personas siguen sin poder acceder a la vivienda en propiedad debido a la falta de ahorro para la entrada de un piso.
"La tendencia de los últimos años nos demuestra que, si bien la compra de una vivienda sigue siendo una mejor inversión a largo plazo, no todos los ciudadanos pueden permitírsela debido a las exigencias económicas iniciales", explican desde Pisos.com.
"La situación plantea un reto para el mercado inmobiliario y las políticas de acceso a la vivienda, ya que la combinación de altos precios, bajos salarios y requisitos financieros restrictivos sigue limitando la independencia residencial de los ciudadanos", ha conlcuido Font.