MADRID 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
El senador demócrata Chris van Hollen ha acusado al presidente estadounidense, Donald Trump, de sumir al país en una crisis constitucional por desobedecer las órdenes judiciales sobre la deportación de inmigrantes.
Van Hollen ha subrayado en una entrevista en la NBC que el Gobierno "está desobedeciendo a los tribunales en este mismo momento" por no facilitar el regreso del salvadoreño Kilmar Ábrego García, deportado por error según ha reconocido la propia Administración norteamericana.
En particular ha cuestionado las acusaciones de que Ábrego, residente en su circunscripción, pertenecía a la Mara Salvatrucha (MS-13). "Si tienen pruebas, que las presenten al tribunal. Así es como se litigan estas cuestiones. De lo contrario, cállense en redes sociales", ha argüido.
Van Hollen responde así a las recientes acusaciones de Trump contra los "lunáticos de la izquierda radical" o los "jueces y agentes del orden débiluchos e ineficaces".
También la senadora demócrata Amy Klobuchar ha criticado la postura de Trump y ha asegurado que "han elegido este caso y a este hombre porque quieren titulares, así que es más cínico incluso que simplemente desobedecer a un tribunal". "Lo hacen porque quieren distraer a la gente del hecho de que nuestra economía está en caída libre gracias a ellos", ha argumentado.
Incluso el senador republicano John Kennedy ha reconocido que la deportación de Ábrego fue un "error", pero ha alegado que ahora mismo no hay mucho que el presidente pueda hacer. "No van a reconocer que es un error, porque si lo hacen se juegan el cuello", ha apuntado Kennedy en la NBC.
Van Hollen visitó el 17 de abril a Ábrego en El Salvador, adonde fue deportado a mediados de marzo en el marco de las políticas impulsadas por Trump para expulsar a los migrantes ilegales del país, si bien en este caso el ciudadano salvadoreño gozaba de estatus de protección temporal concedido por un juez en 2019 tras abandonar su país de origen huyendo de la violencia.
La jueza federal Paula Xinis ordenó su repatriación, si bien la Administración Trump recurrió al Tribunal Supremo para que bloqueara la decisión. Sin embargo, el máximo tribunal estadounidense respondió que el Gobierno debía "facilitar" el regreso de Ábrego, pero sin dictar ninguna orden concreta al respecto.
Organizaciones de derechos civiles han cuestionado la falta de garantías o directamente la legalidad de estas deportaciones masivas impulsadas por Trump, especialmente después de que un juez federal ordenara su paralización por considerar inadecuada la aplicación de la Ley de Enemigos Extranjeros, que data de finales del siglo XVIII.