MADRID 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
El expresidente boliviano Evo Morales ha criticado la orden de detención emitida este viernes en su contra y ha denunciado que la Justicia "parcializada" del país se ha "inventado" un delito sin pruebas, vulnerando sus derechos constitucionales "como en tiempos de la Inquisución" para "eliminarlo" antes de las próximas elecciones presidenciales.
"La declaración de rebeldía ya estaba redactada antes de la audiencia. Revisen imágenes de la transmisión. Seguramente fue enviada por los ministerios de Gobierno y Justicia para que lo lea el juez", ha espetado el exmandatario en una publicación en su cuenta en la red social X. "Solo faltó que ordenen mi descuartizamiento inmediato en una plaza, como ocurría en la Colonia cuando los conquistadores castigaban severamente a los indígenas rebelados contra la opresión", ha apostillado.
Morales ha defendido que los jueces y fiscales que ahora lo señalan como presunto autor de delitos de tráfico y trata, "sin respetar el debido proceso ni la presunción de inocencia, como ordena la Constitución", son "los verdaderos autores" de tales violaciones, pero "el régimen del terror que gobierna" el país hace que "nadie se atreva a iniciarles un proceso".
A juicio del expresidente, estos magistrados "no administran justicia con neutralidad, sino con consignas políticas", haciendo del sistema judicial boliviano un instrumento "parcializado y servil al Gobierno de Arce y Choquehuanca, que tiene dominado a todo el Órgano Judicial".
"Esta 'Justicia' actúa como en tiempos de la Inquisición: sin pruebas, sino con convicciones subjetivas. Mis acusadores no buscan justicia, quieren proscribirme y eliminarme ante las próximas elecciones presidenciales de Bolivia", ha sentenciado.
Estas declaraciones llegan después de que un nacional juez haya ordenado este viernes la detención de Evo Morales tras no presentarse en los juzgados, tal y como estaba citado como medida cautelar en el marco de su investigación por tráfico de personas, en relación a un supuesto abuso contra una menor en 2016 cuando ejercía como jefe de Estado.
Morales no se presentó este martes en los juzgados de Tarija alegando problemas de salud, por lo que la vista fue aplazada para este viernes con la advertencia de que, en caso de no comparecer, sería declarado en rebeldía y se emitiría una orden de detención contra él.
Desde septiembre de 2026, la Justicia investiga este presunto abuso cometido por Morales sobre una entonces menor de 15 años, del que nació una niña. El padre de la supuesta víctima fue detenido, pero la madre está sigue desaparecida. La investigación apunta que ambos se habrían beneficiado políticamente.