BOLIVIA, 28 Aug (EUROPA PRESS)
Luis Caputo, el ministro de Economía de Argentina, anunció el miércoles una notable reducción en el impuesto PAIS sobre las importaciones, pasando del 17,5% al 7,5%. Esta medida se toma en medio de esfuerzos por parte del gobierno de Milei, que al asumir el cargo el pasado 10 de diciembre, había incrementado dicho impuesto en un intento de elevar los ingresos federales y atacar el déficit fiscal. Sin embargo, esta decisión llevó a un incremento en los precios de las importaciones.
Ahora, el ejecutivo liderado por Milei vuelve su atención hacia el combate de una inflación que fuera desorbitante, alcanzando el 26% mensual tras una devaluación de la moneda en diciembre, aunque para julio esta cifra se situó en un 4%. A pesar de que las medidas de austeridad implementadas, incluyendo la eliminación de subvenciones en servicios básicos y transporte público, presentan el riesgo de aumentar los precios, la reducción del impuesto a las importaciones busca aliviar esta presión.
Estos ajustes se ven como pasos hacia la normalización de la economía argentina, dentro de una estrategia más amplia que busca equilibrar las finanzas del país. Sin embargo, las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional por un nuevo acuerdo no han mostrado avances significativos, mientras el gobierno continúa con políticas de control monetario sobre el peso, una moneda que en la opinión pública local está sobrevalorada.
Hasta julio, el arancel PAIS generó ingresos por 4,3 billones de pesos (aproximadamente 4.000 millones de euros), representando cerca del 6% del total de ingresos fiscales del país. Este impuesto abarca una gama amplia de transacciones, extendiéndose más allá de las importaciones. La disminución en este impuesto es vista como un esfuerzo menor dentro de las ambiciosas metas del gobierno de Milei por estabilizar la situación económica de Argentina.