BOLIVIA, 2 Oct (EUROPA PRESS)
Argentina pone en marcha un ambicioso plan de contingencia y previsión energética para enfrentar los desafíos del periodo 2024-2026, con el objetivo de minimizar los problemas de abastecimiento de energía eléctrica ante la creciente demanda y los picos críticos de consumo. La Secretaría de Energía del país ha delineado una serie de estrategias que abarcan desde la generación hasta la distribución de energía, incluyendo la importación de energía y potencia de países vecinos en momentos de alta demanda.
Este plan contempla una serie de medidas excepcionales, como la implementación de un esquema de remuneración adicional para las centrales de generación térmica, incentivando así su disponibilidad en los momentos más críticos. Este esquema estará vigente desde diciembre de 2024 hasta marzo de 2026 y se dividirá en una remuneración fija, basada en la potencia disponible, y otra variable, relacionada con la generación efectiva de energía.
La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) jugará un papel crucial en la gestión de este plan, ya que será la encargada de implementar un procedimiento de despacho excepcional que permitirá un uso estratégico de las unidades de generación eléctrica para mitigar los riesgos de restricciones de abastecimiento.
Entre las medidas adoptadas, también se encuentra la promoción de inversiones en el sector del transporte de energía eléctrica para asegurar el abastecimiento y la seguridad del sistema. Además, se implementará un mecanismo de gestión de demanda dirigido a los Grandes Usuarios Mayores, que será voluntario, programado y remunerado, permitiendo disponer de una oferta de reducción de carga a precio.
Para asegurar el éxito del plan, se ha creado el Comité de Seguimiento de Implementación del Plan de Contingencia, que llevará a cabo un monitoreo continuo y evaluaciones periódicas, pudiendo invitar a organismos relevantes, como el Servicio Metereológico Nacional, para cumplir con su función de manera efectiva.
Esta iniciativa, presentada por el secretario de Energía de Argentina, Eduardo R. Chirillo, responde a la necesidad de prepararse con anticipación para los meses de verano, donde habitualmente se registran los mayores picos de demanda, buscando así evitar las interrupciones del servicio eléctrico que afectan a los hogares argentinos.